lunes, 31 de marzo de 2014

Dulce y salado

Este fin de semana lo hemos pasado bien. Fuimos con unos amigos y sus hijos pequeños a Lade, concretamente a la Sponhuset. Es una casita que tiene servicio de bar y terraza. Lo más popular son sus vaffels. Los más esponjosos de Trondheim según dicen.  Hizo un día espléndido, unos 8ºC de media.


                            Nuestro primer vaffel casero. Sí, sí: Hemos picado y ya tenemos
                                     máquina para preparar sabrosos vaffels en casa :)

Junto a esta preciosa cafetería, se encuentra una gran explanada con vistas al fiordo. Increíbles. De esas que cortan la respiración. Los niños se lo pasaron bomba tirando piedras y construyendo castillos de tierra. Para ir a jugar allí lo mejor es vestirse con el traje de lluvia y las botas de goma. Si fuera yo niña...

Ayer inauguramos la temporada de barbacoa, aunque nos comimos los pinchos dentro de casa, porque hacía un poco de frío.

                                                    
A nivel laboral, acabé la mitad del curso con la familia noruega que os comenté. La segunda mitad la haremos en agosto. Ahora he empezado un curso de español con seniors de 14h de duración (hasta mitad de mayo)  Les imparto un curso que mezcla gramática con cultura, arte e historia de la ciudad de Toledo, a la que irán de visita pronto. Todo un reto y muy enriquecedor.

Aparte los martes por la tarde sigo con un grupo reducido de dos médicos con los que llevo un tiempo. Son un encanto. También estaré con ellos hasta principios de mayo. 

Ahora con muchas ganas de que llegue la Påskeferie (vacaciones de Pascua), porque viene mi hermana Carla a visitarnos. Es su primera vez y tengo ganas de sorprenderla (Prepárate ;)

Por último, aprovecho para compartir el link de mi primera colaboración con Familias en Ruta. Pinchando aquí lo podéis leer.

¡Hasta la próxima!







lunes, 24 de marzo de 2014

Sorpresas

El martes fue el día de puertas abiertas de la barnehage de los chicos. La finalidad era ver el funcionamiento de la misma. Aunque cuando hicieron la adaptación pude conocer muchos detalles de la escuela, ahora desde la experiencia también me di cuenta de otras cosas.

Sin duda, lo que más feliz me hizo fue el recibimiento de Arnau. Ese día en la escuela vendían vaffels y bebida. Los beneficios fueron donados en una visita de la maestra con los niños a Redd Barna, una ONG con la que colabora el jardín de infancia.

Al verme aparecer por la puerta de la barnehage, mi chico mayor vino corriendo y me dio un abrazo. Muy orgulloso, me enseñó el cartel con los precios de la comida que vendían. Lo habían preparado entre todos. Compré un par de vaffels y una bebida para él. Estaba muy contento. Fue una sorpresa preciosa para mí (amor de madre, lo reconozco)

El viernes también fue un día especial. Empecé a reforzar mi nivel noruego con una voluntaria de Dialogsenteret. Era maestra en la ciudad antes de jubilarse, y  en el último Morsom Fredag se ofreció para ayudar con el idioma a quién lo deseara. Así que quedamos una hora antes de la reunión con ella. Charlamos y me corrigió un texto que había redactado. Luego me resolvió algunas dudas de gramática que tenía. Un mix perfecto. La semana que viene, más.

Lo cierto es que, aparte de mejorar con el idioma, se establece un lazo bonito entre nosotras. Cuando acabamos la clase, empezó la reunión de mujeres. Comentamos sitios especiales de Trondheim y cercanías. Algunos los conocía y otros no. Por cierto, comimos de maravilla, gracias a las tres voluntarias noruegas que habían preparado magdalenas y bollitos caseros. Estaba todo colocado con sumo cuidado en unas cestas de mimbre preciosas. Koselig total.

Al acabar comentamos la dificultad de hacerse un hueco laboral en Noruega. Y es que si tienes un perfil que el país necesite y dominio del idioma, no hay problema. De lo contrario no es fácil integrarse en cuanto a trabajo se refiere. Si que se ofrecen programas de praxis a determinados colectivos, previo aprendizaje de noruego, o voluntariado.No obstante, conseguir un trabajo regular remunerado es complicado.


Por mi parte, seguiré luchando por conseguirlo.  Por ello, estoy trabajando duro, y abierta a aprender de aquí y allá. Lo que surja. Lo cierto es que con las clases de español estoy contenta. Y con ganas de seguir con ellas, y encontrar más trabajo. Poco a poco supongo. Roma no se construyó en un día.

Antes de que se me olvide, aunque por facebook y twitter lo comenté, deciros que estoy muy contenta de formar parte del equipo de redactores de la revista digital para familias de nombre "Familias en Ruta". Cuando salga mi primer escrito os informo.

¡Hasta la próxima!




martes, 18 de marzo de 2014

¡Nieve!

Esta entrada será visual esencialmente. ¡Por fin ha llegado la nieve a Trondheim! Hacia meses que no nevaba, y empezaba a ser raro, muy raro.

Si paseas por la ciudad, te puedes encontrar escenas como esta.



Casitas bucólicas.



Masse snø!



¡Hasta la próxima!


viernes, 14 de marzo de 2014

Prevención

Esta semana hemos entrado en rutina de nuevo y ¡bienvenida sea! Aparte de asistir al siempre positivo y alegre club de conversación de mujeres en Dialogsenteret, he conocido a un grupo de madres internacionales, que se reúne una vez a la semana en la ciudad. Muy majas la verdad sea dicha. Tampoco falté al språkkafe, y el miércoles tuve ocasión de ir a un bokkafe en el centro de voluntarios de mi barrio.

Todo ello junto con la enseñanza de español me ha reportado una semana completa y variada. Empiezo a tener cierta estabilidad emocional, que, en mi opinión, es lo más difícil cuando emigras a otra ciudad.

Por cierto, Adrià comienza a chapurrear un poco de noruego en casa. De Arnau nos comentó la profesora que dice algunas palabras en trøndersk, el dialecto de la ciudad. Yo estoy aprendiendo bokmål (es la variante oficial del noruego que se enseña en las escuelas de idiomas) Mis hijos hablan trøndersk. Es divertida la situación. No obstante, conozco algunas palabras del dialecto, porque una parte del segundo curso de noruego que hice consistía en aprender algo de trøndersk.

Por otro lado, el mayor está feliz como una perdiz, porque ayer fueron a un gimnasio de Trondheim que le encanta. Organizan visitas cada mes y medio aproximadamente. Se divierte mucho subiendo por la cuerda, o colgándose en las anillas.  

En Noruega el deporte es una pasión nacional, pero en algunos casos me parece una obsesión. Haga el tiempo que haga y sea la hora que sea, siempre ves a alguien corriendo por la calle. Incluso si hay hielo, ello no es óbice para marcarse un sprint. En las tiendas venden deportivas con clavos para la ocasión. Por otro lado, hay que explicar que el deporte es una forma de cuidar la salud para los noruegos. Es decir, que aparte de disfrutar, lo practican por prevención. El grupo del Ayuntamiento "Frisklivsentralen" es un ejemplo. Organizan actividades y dan buenos consejos para llevar una vida sana.

Os explico: Pongamos por caso que vas al médico por un constipado. En la consulta, el doctor o doctora te preguntará por tus hábitos alimentarios y deportivos. Y puedes irte simplemente con el consejo de que debes llevar una vida sana. Esta filosofía de vida da sus resultados. Los ancianos caminan más rectos que un palo, y hacen senderismo aún ser muy mayores. Están en plena forma y lo disfrutan. En cuanto a la comida, a la vista de lo que hay en los supermercados, os confieso que yo prefiero la dieta mediterránea.

Continuando con el tema hace pocos días nos llegó a casa un aviso: Arnau ha de ir al dentista. No sabíamos el por qué hasta que nos informaron por teléfono. Resulta que a partir a los seis años los niños deben pasar por un chequeo gratuito de salud dental. Les enseñan qué es el flúor y buenos hábitos de higiene bucal, además de comprobar si tienen caries o no. Se puede acudir al dentista sin coste hasta que se cumplen los dieciocho. Lo que desconozco es si hay tratamientos que están excluidos, pero imagino que sí.

La prevención también es algo importante en las relaciones humanas. De hecho, es muy difícil presenciar un conflicto entre dos personas en Trondheim (siendo una de ellas de nacionalidad noruega). Se intenta evitar por todos los medios. Incluso en las peleas infantiles no se suele intervenir por parte de los padres. No ven mala fe en las actuaciones de los otros por lo general.  Cuando algo se tuerce lo asocian a la idea de "será un malentendido". Dicho esto, supongo que sus excepciones habrá. Pero lo que es cierto es que los noruegos evitan a toda costa entrar al trapo.

¡Hasta la próxima! ¡Feliz fin de semana!





miércoles, 5 de marzo de 2014

Sueños de mariposa (II)

Hace unos meses escribí una entrada sobre ello. Pues bien, ayer se cumplió uno (en parte) Tuve la ocasión de hacer una visita a la NRK (televisión y radio noruega) en el barrio de Tyholt en Trondheim. 

Fui a acompañar a un grupo de vecinos de Sjetnemarka y Tiller. Iba en representación del centro de voluntariado de mi barrio. En total, éramos veinte. Al llegar recogí el dinero de cada uno de ellos para poder pagar la excursión. Una guía muy amable de NRK empezó la ruta. Primero, nos acompaño a la zona de la radio: El medio de comunicación que más me gusta, sin lugar a dudas. Escuchamos un programa en directo. Luego nos dirigimos a la zona del control de tráfico. Tienen una sirena que les avisa cuando hay atascos o incidencias. También tienen una sección de noticias históricas. Finalmente, pudimos entrar al estudio donde se graban las noticias de actualidad.
                                                      
                                          Imagen extraída de Flickr. Autor: nrkbeta

Comimos en la cantina de la NRK. El menú sencillo pero rico. Típico noruego. Aunque yo hubiera repetido varias veces. Era una tostada de pan vienés con vegetales diversos y salmón ahumado. De postre un bolle con pasas. Café y agua para beber.

La excursión duró tres horas y media, y fue una gozada poder escuchar a varios profesionales de la cadena contando diversos aspectos de su trabajo. Realmente no lo entendía todo 100%, pero pescaba trozos. Además hacer de voluntaria de nuevo me encantó, y pude charlar con los participantes.

Por otro lado, se abren caminos nuevos en mi vida. Recientemente, he empezado a trabajar como profesora de español en la ciudad. De momento, enseño castellano entre una hora y media y tres a la semana. No es mucho tiempo, pero estoy ilusionada. Son alumnos de diferentes niveles. Cada uno de ellos me aporta cosas distintas y enriquecedoras. 

El grupo más singular que tengo es una familia noruega de cuatro. Padres e hijos están interesados en aprender español, porque van de vacaciones a España pronto. Contrataron un curso de seis horas a una academia de Trondheim, y me lo han asignado. Al ser un nivel de español inicial debo usar el noruego como lengua vehicular en ciertas ocasiones, lo que también supone un reto, a la vez que un aprendizaje para mí.

El hecho de que haya dos niños pequeños me encanta, porque he descubierto una faceta creativa de mí. Pensando ideas para que les resultara atractiva la clase, dibujé una heladería sencilla, con los precios y diferentes bolas de helados. La pinté con colores alegres. Luego preparé unos recortables de cucuruchos y bolas de diferentes gustos. Jugamos a pedir un helado los cinco. Funcionó y pasamos un rato divertido. Me dí cuenta una vez más lo grandes que son los maestros, porque no es tarea fácil captar la atención infantil. 

Por último, deciros que el chiquitín de la casa tiene un año más.  Y Pau también. Celebramos un cumpleaños tranquilo, con...

Pastel,

Lego,

Y una caja de cartón...
                                         



 ¡Hasta la próxima!