miércoles, 25 de septiembre de 2013

Nuevo hogar

Como recordaréis, a finales de julio nos comunicaron la mala noticia de que habíamos de abandonar el piso donde vivimos. La verdad es que fue un jarro de agua fría, porque nos habíamos encariñado con la casa. Pero pasado el disgusto, nos pusimos manos a la obra. Finalmente, ayer por la tarde firmamos el contrato de alquiler de lo que será nuestro nuevo hogar.

Nos trasladamos a las afueras de la ciudad. Estaremos bien comunicados con el centro de Trondheim, escuela y trabajo (25 minutos de bus), y en plena naturaleza. Entrando al supermercado, nos dio la impresión que es un barrio con vidilla, porque había muchos carteles de canguros, cursos, actividades etc. Ahora  pensando en la mudanza (otra vez) La previsión es estar allí a mitad de octubre.

                                                       Imagen de Flickr de Ángel García Fdez

Alquilamos la planta baja de una casa unifamiliar. En el piso de arriba, vive una pareja de mediana edad. La casa tiene un porche coqueto, y un espacio con piedrecitas y plantas para nuestro uso. Podremos acceder al jardín que está a la altura del primer piso, cuando el propietario y su pareja no estén. 

La firma fue bien. El piso donde viven el propietario y su pareja es precioso, estilo nórdico, sobrio y elegante a la vez. Ella trabaja en el sector immobiliario. Se nota por el tipo de contrato de alquiler, y por cómo explicaba ayer las cláusulas. Los chicos estaban excitados del día, pero se pusieron contentos cuando les ofrecieron bombones y zumo. Luego, el propietario nos llevó a casa en coche. La verdad es que fue de agradecer, porque era tarde. 

Cambiando de tema, las clases de noruego siguen su curso. Tenemos nueva  profesora, pero la verdad es que es muy maja también. Además resulta que vivió un tiempo en Ecuador y Cuba, y sabe español. Cuando acabó la clase de ayer, estuve hablando un poco con ella. Hace una ilusión tremenda poder conversar deprisa y sin pensar.

Para este mes y el que viene, me he propuesto el reto de entender las canciones que cantan los niños en la barnehage. Ya empiezan a tararearlas, y quiero compartirlas con ellos como hacíamos en Barcelona. Aunque nuestras canciones tradicionales no las perdemos. De hecho, vemos vídeos y dibujos, y escuchamos música en catalán y castellano muchos días.

Para acabar os dejo con el vídeo de una canción nórdica, que se canta en las escuelas, sobre una araña (Lille Petter Edderkopp) Está escenificada por una madre. La canta muy clarita, y es práctica para aprender noruego. Podéis leer la letra en noruego y la traducción al castellano pinchando aquí 


¡Hasta la próxima!

PD: Me ha llegado un e-mail del Aquàrium de Barcelona con una promoción del 40% de descuento en sus entradas hasta finales de octubre. Lo comparto por si os interesa. Más info aquí.






3 comentarios:

  1. Qué odiosas son las mudanzas!!! pero qué ilusión hace estrenar nuevo hogar!! Nosotros hicimos mudanza durante el embarazo y otra cuando Tiago a penas tenía 4 meses...¡de locura!

    Espero fotitos de la casa y el entorno! Lo describes como un buen lugar para vivir.

    Besos

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    1. Ahhhh y sobre la canción....los gestos y la melodía son como la canto yo!!! que chulada de coincidencia!

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    2. Sí que son odiosas. Vosotros veo que también habéis "sufrido" varias en poco tiempo. Para nosotros es la tercera en tres años. Pero intentaremos cogernos esta con filosofía. Cuando estemos instalados haré fotos, y explicaré más del barrio, pero hemos tenido un buen feeling inicial. Besos. PD: Me ha hecho gracia lo de la canción. Ya te imagino con tus niños y niñas

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