domingo, 30 de junio de 2013

Verano

¡Por fin de vacaciones unos días los cuatro! Toca olvidarse del reloj. Los días fluyen con calma y relax. Si pienso en mi infancia y en la palabra verano, en este momento, visualizo la paella de caracoles de mi abuela Celia. Caracoles de esos pequeños rayados como una cebra. También caracoles grandes, y con la cáscara marrón. Cuando íbamos a Almassora a verla siempre nos regalaba un vestido hecho a mano a mis hermanas y a mi. Y mi abuelo nos llevaba a comer berberechos y cacahuetes al bar.

Hoy ha sido un día soleado, y lo hemos pasado en el jardín. Primero de barbacoa. Luego, por la tarde, hemos puesto en práctica algo que seguro que recordáis de niños. Aprovechando un basket vacío de los champiñones, lo hemos rellenado de tierra. Luego ha llegado el turno de poner las judías. Finalmente, Arnau las ha tapado con tierra. Un poco de agua y ¡a esperar! 


Aprovechando la vena jardinera, he lavado dos botellas de cerveza y las he convertido en un par de jarrones improvisados. 


Vi la idea en una tienda de decoración hace pocos días. Venden botellas de vidrio vacías de todos los tamaños y colores. A veces, cuelgan en ellas algún detalle coqueto, o las llenan de piedras de colores. También las ponen en cajas de madera o dentro un cesto forrado sin más.

¡Buenas noches!







sábado, 29 de junio de 2013

Compraventa noruega

Como Pau os contaba en su blog, encontrar piso de alquiler en Trondheim es una auténtica lotería. Primero divisar el anuncio. Rápidamente concertar visita o ir a las viewings programadas. Entre los diversos interesados, el propietario elige y en pocos días el piso ya está arrendado.

Si es sorprendente la rapidez en los arrendamientos, en las ventas es increíble. El piso se pone en venta y se conciertan las visitas presenciales. Pocos días después comienza la subasta. Se parte de un precio inicial y los interesados van pujando a través de sms. Un intermediario inmobiliario controla el tema. Éste va llamando al agente bancario, que confirma si lo que la persona interesada está ofreciendo por el piso lo puede pagar. Es decir, acredita la solvencia del comprador. 

Cuando el número de interesados desciende considerablemente, las pujas se hacen por teléfono. Finalmente, se adjudica la vivienda al mejor postor. Es un proceso sorprendente y a la vez estresante. Más adelante, profundizaré en detalle sobre el tema.

Trondheim es una ciudad con mucha demanda, y menos oferta de la deseada. Alquilar o vender actualmente es un negocio seguro. Aquí se acogen a muchos universitarios cada año. Es un lugar que goza de amplia cultura musical, teatral y periodística.  Tiene paisajes preciosos, y todos los servicios al alcance de la mano. Una city con mucha vida y atractiva para vivir, pese a sus gélidos inviernos.

Hablando de música, he estado buscando algunas canciones infantiles noruegas para ir aclimatando a los niños. También les sigo poniendo videos nuestros para que conserven nuestra cultura. Les encantan los del grupo Mainasons, que, innovando con notas de reggae, jazz y otros estilos, reviven las canciones catalanas de toda la vida.

¡Saludos!









jueves, 27 de junio de 2013

Noruego

Esta semana hará un mes que aterrizamos en Trondheim y empiezo a entender mis primeras palabras de noruego. Ayer en una exhibición de tango en el Martnan, conseguí descifrar lo que iba diciendo el presentador. Primero comentó que habría una muestra de baile. Luego, que en septiembre empezaría un curso. Pero menos flores, que mi noruego sigue siendo más que básico. En inglés cada vez mejor, y en las tiendas ya me apaño con dignidad. 

La semana que viene comenzaré a mirar cursos de noruego. Escrito es un idioma bastante intuitivo, pero hablado la cosa se complica. Tengo ganas de saber lo que pone en todas partes, y también aprender el idioma para integrarme mejor.

Aclaro que no tengo intención de apuntarme a tango (ejem). Hace unos años lo intenté con la salsa y fue desastroso. No obstante, fue curioso ver a diversas parejas de lo más variopinto bailando al ritmo musical argentino. La imagen más bonita la protagonizaron unos padres que danzaban con su bebé en un foulard. Muy tierno. 

En Trondheim se ven familias continuamente. Y muchas embarazadas. La buena baja por maternidad-paternidad que tienen ayuda, pero también la concepción de que los niños son el futuro. Se organizan muchos eventos para ellos. La gente sonríe cuando ve a los críos.  Son socialmente queridos. 

Por cierto, ayer también vimos una subasta de antigüedades y objetos del hogar. Las cosas no duraban más de un minuto. Enseguida ¡adjudicadas! 

¡Hasta la próxima!






martes, 25 de junio de 2013

Martnan

Trondheim se viste de fiesta para celebrar el Martnan durante tres días. Es un mercado de larga tradición en la ciudad, que en su primer día me ha recordado mucho a las celebraciones de Sants.

Montones de globos para los enanos, música, y diferentes paradas se reparten en el centro de la ciudad. Predomina la promoción del turismo y los puestos gastronómicos. Se pueden degustar platos thai, crepes, etc. E incluso hay embutido propio. Hemos encontrado también una parada española. La verdad es que se me iban los ojos con el manchego y el chorizo auténtico. En el supermercado, bajo denominación de producto español, venden un chorizo y un salchichón que da miedo, y además caro. Lástima que en la carpa del stand había dibujado un toro, pero en fin, supongo que es lo que vende en el extranjero. 

Es curioso, pero aquí se sienten atraídos por bailes de países de lengua castellana como el flamenco, el tango y la salsa. En los tres días que dura el evento se harán diversas exhibiciones.

Al mediodía había espectáculo infantil, y, aunque entendíamos palabras sueltas, los niños y yo hemos pasado un buen rato. Adrià se reía un montón con la gesticulación y las muecas de los actores. 

(Foto teatro infantil. Web Martnan)

Se han sentado cerca suyo unos niños de un casal de verano. A Arnau se le notaba que le hacía gracia tenerlos cerca. Por cierto, los pequeños empiezan la barnehage la segunda semana de agosto. También hay unos días de adaptación como en Barcelona. 

Cambiando de tercio, una cosa que me llama la atención de Noruega son las escobas. Puede parecer una tontería pero son muy pequeñas (para Pulgarcito casi, casi). Te pasas un buen rato para recoger las migas y el polvo del suelo.  Pero nada que no tenga solución, porque, en breve tendremos a nuestra Roomba en casa (nos la traerán mis suegros que vienen de aquí pocos días a vernos)

Por último, esta mañana hemos estado en Hacienda, y los niños y yo hemos solicitado el número personal. Tardará unas tres semanas en llegar y  cuando lo tengamos iremos a tramitar la ayuda por hijo a cargo. A ver si hay suerte y nos la conceden. Cumplimos los requisitos, pero como reza un dicho que sigo a rajatabla, no diguis blat fins que no sigui al sac i ben lligat. Que después vienen los chascos.

¡Hasta la próxima!








lunes, 24 de junio de 2013

De dragones, flores y otras historias

¿Cómo va la post-revetlla de Sant Joan? ¿Muchos petardos, cava y coca de llardons? Echamos de menos la verbena desde Trondheim. Aquí hoy es día laborable y os sigo contando cosillas.

De momento seguimos sin cortinas en algunas ventanas del piso (en los dormitorios por suerte sí hay). Aquí la gente no suele poner telas tupidas, sino que decora las ventanas con plantas u otros objetos. Se usa mucho la media cortina también. Supongo que como gran parte del año tienen poca luz, les interesa que entre la máxima.

Hoy compraremos algunas flores a ver si creamos un ambiente un poco más íntimo. Aunque nos vamos acostumbrando, no deja de ser extraño poder ver la calle continuamente y que la gente te vea a ti (aunque no miran nunca)

También he estado mirando detalles caseros. ¡Mirad qué piedras tan bonitas! (encontradas en grupo de facebook Criatures.cat)


Tendré que practicar, porque las manualidades no son mi fuerte. Tendré que convertirlas en un hobby. A los noruegos les encanta, aparte del deporte y la naturaleza, las aficiones indoor, obligados también por la climatología.

Ayer tuvimos en casa a nuestros primeros invitados, una familia de nuestra quinta que vive aquí hace algo más de un año. Nos brindaron buena compañía y un montón de consejos y sitios para visitar. Comentaron que la carne de reno es deliciosa. Y que la carne de ballena, aunque se vende, no goza de gran prestigio. Antes del descubrimiento del petróleo, Noruega era un país muy modesto económicamente hablando, y la carne de ballena con patatas se comía día sí, día también.

Por cierto, le hemos cogido el truquillo a la barbacoa, y la carne quedó muy rica. Tuvimos de nuevo dieciocho grados.

El tema del saludo es curioso. No se dan los dos besos por mejilla nuestros o los tres de los belgas. Simplemente se encaja la mano cuando conoces a la persona en cuestión, y luego ya nunca más. Adrià tendrá que acostumbrarse, porque es de lo más cariñoso y le encanta dar besos.

Ah, nos hemos adaptado a los horarios de comidas de aquí y cada noche sobre las nueve vemos alguna película o serie. Ahora estamos enganchados a Game of Thrones (segunda temporada). Me fascina el personaje de Daenerys y sus dragones. Una mamá guerrera que desprende mitología por todos sus poros. Recuerdo las traducciones de mitos en griego cuando iba al instituto. Geniales, y mejores que las de latín que casi siempre eran bélicas.

     
¡Hasta la próxima!








viernes, 21 de junio de 2013

Dieciocho grados

Primer día de verano y unos fantásticos 18ºC nos acompañan en Trondheim.
Esta mañana ha tocado un poco de deporte. Los pequeños me han dejado agotada jugando a fútbol en una pista del barrio. Luego por suerte se han entretenido con la multitud de dientes de león que había.



Cuando empiecen el curso escolar, me gustaría practicar algo de footing. A ver si lo consigo y les puedo seguir el ritmo (ejem).

Aquí también es el último día de escuela de los niños (bon estiu, Pràctiques 2!). En la ciudad hay algunas actividades organizadas para el verano. Ya os iré contando.

Esta semana hemos visitado la clase de Adrià. Sorprende porque está hecha a prueba de las fieras: No hay cantos de mesas, ni cristales ni piezas pequeñas. Está lleno de colchonetas blanditas, y juguetes grandes. También disponen de un pequeño circuito de rampas para estimular el gateo y el equilibrio en los que ya saben caminar.  Lo mejor es que las clases de los dos están una enfrente de la otra. Así para ellos la adaptación será más fácil.

A los niños les hizo gracia volver a ver lo que será su nueva escuela, aunque Adrià estaba inquieto. Creo que pensó que empezaba aquél día, porque vigilaba constantemente donde estaba la mama. Nos hicieron un pequeño tour y comprobamos que el vestuario es enorme. Pero es que si uno lee la lista de ropa que necesitan se entiende: Chubasquero, mono de nieve, traje impermeable, guantes, gorros, botas afelpadas, botas de agua etc. Nos llegó por correo electrónico en noruego y casi me da un jamacuco. Pero nada que no se pudiera solucionar con un diccionario y especialmente con el Google images

Este mes nos tocará comprar el susodicho vestuario para los dos. Miraremos, aparte de las tiendas recomendadas, el mercado de segunda mano. Aquí es bastante popular. El otro día nos estrenamos comprando un microondas a un chico del barrio (a través de una página web noruega muy conocida).

¡Besos veraniegos! ¡Buen fin de semana!






jueves, 20 de junio de 2013

Melancolía

Echo de menos:

1.- Estar con mi madre, y las conversaciones de política con mi padre. Las bromas de mis hermanas y el cariño de mi hermano. A mis sobrinos.

2.-La complicidad, confidencia, y la confianza de los buenos amigos.

3.-Las charlas del trabajo, y poderme poner la toga.

4.-La salida del colegio y la escola bressol. 

5.-El barrio de Sants. Barcelona.

Soy feliz en Trondheim, pero un ratito cada día mis pensamientos están ahí.

Y para finalizar, nada mejor que una canción de mis tiempos mozos (remembering Zeleste Sur)




En breve, más cosas. Un abrazo.

















miércoles, 19 de junio de 2013

Picnic day. Alegría.

Hoy me he despertado y he tenido el pronto de...Picnic day! Hemos preparado unos bocadillos y nos hemos ido de excursión a la fortaleza de Kristiansten. Está tan solo a 1km de casa por lo que es asequible para ir con los niños. Uno en cada mano y ¡allá vamos!

Cuando hemos llegado, como era un poco tarde, hemos pasado directamente a devorar los bocadillos. Estábamos solos en una mesa de picnic con vistas a la ciudad. Un lujo. Después de paseo por la zona. Los pequeños han quedado impresionados con los cañones. Adrià decía: què és això, mama? Y Arnau me preguntaba si alguna vez se volverían a usar. Su curiosidad es infinita.



Sin duda, es un lugar totalmente recomendable para quien quiera ver una buena panorámica de Trondheim, y desde diferentes ángulos. Además si no llevais refrigerio, hay una coqueta terraza para tomar algo (los precios no los sé, ejem) 


Por último, hoy ha sido un día alegre. No puedo acabar esta entrada sin felicitar a mi buena amiga Rebeca, que ha sido mamá por segunda vez. ¡Enhorabuena, familia! ¡Carpe diem!. Desde aquí os enviamos muchos besos de parte de los cuatro.

¡Hasta la próxima!









lunes, 17 de junio de 2013

Geocaching

Hoy os propongo un juego fácil y gratuito para hacer en familia: buscar tesoros. Ayer en casa reunimos los objetos preferidos de Arnau, y los escondimos en el jardín. Luego él salió, y, a través de adivinanzas, fue localizando sus preciados enseres. Adrià le hizo de ayudante.

El juego permite múltiples variables, dentro o fuera de casa, tesoro conocido o desconocido etc. Y lo mejor es que se puede jugar tantas personas como se quiera (com més serem més riurem!)





A Arnau le encantan los misterios y los juegos de pistas. El otro dia le contaba emocionado a Pau, que en las colonias de la escuela habían hecho una ginkana de piratas. Y que cuando encontraron el cofre, dentro había parches para todos los niños. También recuerda la búsqueda por el patio del colegio organizada por las monitoras del comedor. Al final, la recompensa fue una divertida piedra pintada (en la foto se puede ver una.)

Por cierto, no sé si sabíais que existe toda una comunidad de internautas aficionada al tema de los tesoros. Como lo oís. En muchos lugares se puede practicar el llamado geocaching (buscar tesoros que otros han escondido y compartirlo en la red). Hemos descubierto que en Trondheim también existe, así que cuando conozcamos mejor la ciudad nos apuntaremos en la web

Aprovechando la temática, os recomiendo una colección de libros de precio asequible y que tienen entusiasmado a Arnau. Fue un regalo casual de mi madre y no podía haber acertado más. Se trata de la colección Misteri, Misteri (ed. Zendrera Zariquiey). A través de los divertidos personajes de Àlex y Kaki, los más pequeños (con la ayuda de un adulto) podrán descifrar diversos enigmas que se les plantean en  distintos países. Y también aprender la cultura y costumbres de  diferentes rincones del mundo jugando. Los mayores podrán disfrutar ellos mismos del libro.




¡Hasta la próxima! ¡Tusen takk (mil gracias) por leerme!






domingo, 16 de junio de 2013

Curiosidades

Hoy algunas curiosidades de Trondheim...

1.-  Ayer el sol se puso a las 23:30h y ha vuelto a salir a las 3h de la madrugada de hoy.

2.-  Hay casas con hierba y plantas creciendo en el tejado (debido a las lluvias frecuentes.)

3.- Tienen alarma antibombardeo (cómo lo oís). El otro día hicieron una prueba piloto y ¡menudo susto!

4.- En menos de un mes un propietario alquila su piso ( hay mucha demanda por ser ciudad universitaria.)

5.- Los niños visten con colores alegres y llamativos.

6.- Las mujeres solo llevan bolso en primavera y verano. En invierno y otoño mochila (el bolso se congelaría y no es práctico llevarlo encima de un  grueso anorak.)

Y una canción que me inspira...




¡Feliz domingo!

sábado, 15 de junio de 2013

Miscelánea

Ayer fue un día intenso. Pau tuvo día libre por mudanza y nos pasamos el día abriendo cajas y colocando las cosas en su sitio. Ahora hemos de preguntar al propietario si nos puede dejar una sierra para poder desmontar la caja de madera. Neotrans/PakFormula sigue sin dar señales de vida, pese a nuestros correos electrónicos (el teléfono directamente ni lo cogen), así que nos damos por vencidos y ya nos apañaremos como sea con la dichosa caja. 

Los otros residuos del embalaje, lo que era papel pudimos eliminarlo en la chimenea. El cartón lo guardaremos. Y el plástico lo iremos tirando poco a poco. Aquí cada casa tiene cubos de basura  para el papel, los envases y los restos. Lo que pasa es que no hay servicio de recogida diario, por lo que paciencia.

Cambiando de tema, parece mentira pero la llegada del sofá a casa le da un toque de lo más hogareño. Hoy haremos pedido a IKEA para hacerles un rincón de juegos a los pequeños. No tenemos muchos muebles, pero preferimos un espacio lo más diáfano posible con los niños. En Barcelona nos funcionaba muy bien así. Faltará colgar algunos cuadros. Los detalles ya irán llegando con el tiempo.

Esta mañana aprovechando el solete hemos bajado al centro. Os presento a un gato motero y una tienda de lo más vintage




También hemos divisado una fiesta medieval. Adrià venga a decirle adéuuu a todos los caballeros.


Por último, hemos comprado una barbacoa. Si  mañana hace buen tiempo, la estrenaremos. En la tienda nos hemos encontrado a una pareja de catalanes con su bebé, a los que Pau conoce por el curso de idiomas. Sin darme cuenta, he ametrallado a la chica a preguntas. Y es que topar con alguien que habla catalán o castellano, y no tener que pensar cómo expresarte, es emocionante. Tendré que controlarme la próxima vez.

Y ahora toca sofá, peli y manta ¡Buen fin de semana everybody

PD: Por cierto, estoy muy ilusionada, porque acabo de descubrir que aparezco en un blog natural y original como la vida misma, Aquí ho deixo dit (gràcies, Yolanda!). Uno de mis favoritos. Os invito a visitarlo pinchando aquí, o en Mi lista de blogs

jueves, 13 de junio de 2013

Mudanza en la calle

Hoy le dedico mi entrada a la empresa Neotrans/Pak Formula, a quien encargamos la mudanza nuestros enseres de Barcelona a Trondheim. Habéis cumplido lo que preveía Pau en su blog. Después de 33 días han llegado las cosas a Noruega, pero no exentas de sorpresas. 

El transportista se ha negado a entrar las cajas en casa y las ha dejado en la calle. Sin ninguna razón, que no podía y punto. Informo que de los tres palets he podido descargar dos, pero para las cajas de madera estoy haciendo guardia hasta que Pau vuelva de trabajar. Se necesitan dos personas al menos para entrarlas en casa. Cuando podamos desembalar las cajas: ¡a saber que nos vamos a encontrar! 


Pequeño detalle: La empresa de mudanzas en ningún momento nos ha dicho qué ha pasado este mes. Nos pidieron hace dos días que les informáramos nosotros cuando llegaran las cosas. Surrealista. Indignante.

¡Besos, lectores! Mañana será otro día.




miércoles, 12 de junio de 2013

Escuelas noruegas


Hoy hemos ido a la fiesta de bienvenida de la clase de Arnau de su nueva escuela o barnehage.

Las barnehage cubren el período de edad de 1-5 años. Vienen a ser el equivalente de lo que en Barcelona son nuestras queridas escoles bressol (Molts petons, ratolinetes)

El curso 2014-2015 comenzará el colegio o skole, así que volveremos a estar liados con las preinscripciones en unos meses. Pero al menos, empezaremos con la fase de educación gratuita.

Lo que más me ha sorprendido de la visita es que hay bastante personal académico trabajando: Profesores, pedagogos, y auxiliares. Van vestidos con chalecos llamativos para que se les distinga, y con una pequeña placa identificativa.

La escuela tiene un patio muy agradable donde apenas se oye ruido de coches. Hay niños de diferentes nacionalidades jugando y riendo.

Los grupos de niños se dividen en diversas clases con nombre de plantas (realmente, aquí la jardinería es una pasión nacional). La clase de Arnau tiene tres ambientes, el de juegos y la cocina, el de las manualidades, y por último, una habitación con unas gradas donde les explican cuentos.

Hemos estado una hora, y los pequeños se lo han pasado pipa con los Lego. No querían irse. Parece que Arnau ha hecho buenas migas con un niño alemán que lleva tiempo en la ciudad.

Nos han comentado que los primeros días del curso vendrá un intérprete de español, pese a entendernos en inglés. El objetivo es que captemos mejor las normas y las costumbres que tienen. No nos lo esperábamos, la verdad sea dicha, pero seguro que ayuda.

Luego, los niños y yo nos hemos acercado a la zona de la catedral de Trondheim a disfrutar del sol, y los 16ºC que nos acompañan hoy. Sin duda, el mejor día desde que hemos llegado.

A Arnau lo tiene fascinado el cementerio. Mientras lo observa, me cuenta historietas de vampiros, aparte de hacer millones de preguntas. Pero ese es él. La cotorra curiosa de la casa.

Paseando hemos descubierto un mirador. El río amansa a las fieras.


Y de camino de vuelta a casa, ¡no hay diente de león que se les resista! ¡Hasta pronto!





martes, 11 de junio de 2013

Poti-Poti

Hoy os traigo un mix de cosas que hicimos ayer en tierras noruegas.

En primer lugar, nos dimos de alta en la policia los niños y yo como residentes de la ciudad. Pau nos acompañó. Costó un par de horas el trámite, pero la verdad es que fueron  muy amables en todo momento. Lo próximo será gestionar nuestro número personal, que nos permitirá hacer las gestiones del día a día sin problemas. 

Las instalaciones de la policia de immigración de Trondheim son curiosas. Si el trámite requiere protección de datos, corren unas cortinas de terciopelo a modo de cabina electoral. Cada cubículo tiene las cortinas de un color, y desde la sala de espera solo ves los pies del ciudadano en cuestión.

Luego fuimos a comer un kebab los niños y yo, y a descubrir más el centro de la city. Resulta que en la calle donde trabaja Pau, hay un montón de tiendas de decoración y varias floristerías. Finalmente, di con un local de detalles para el hogar a precios asequibles. Entre los tres, pudimos elegir algunas cosas para hacer la casa más acogedora.



También les regalé un Lego para los dos, ya que aún no tenemos la mudanza aquí y echan de menos sus juguetes. A ver si esta semana hay suerte y llega el camión de Oslo.

Por cierto, ayer  tuve que sacar mi inglés del garaje de nuevo. En este caso, para pedirle a una dependienta un cesto de la compra. No me salía la palabra. Venga a darle vueltas haciendo la definición de lo que quería. Hasta que al final di en el clavo, y me dijo "Baskets are here"

Es difícil acertar la expresión cuando hablas un idioma ajeno, aunque academicamente sepas cómo decirlo. Pero me voy desoxidando. Me hace feliz el reto idiomático.

En cuanto al noruego, hemos empezado una pequeña biblioteca. De momento tenemos tres cuentos infantiles, y un diccionario. Recuerdo que de pequeña, mi madre nos regalaba libros a mis hermanos y a mi. Bajábamos cada semana a comprarlos a un puesto del Mercat de la Llibertat. Allí me empecé a estrenar con mis primeras lecturas de Enid Blyton.

Hoy el día está siendo más complicado. Adrià està rebelde, y hace una tras otra. Paciencia. No queda otra.

¡Hasta pronto!






lunes, 10 de junio de 2013

Mami full time

Ahora que estoy de mami full time, mientras no empieza la escuela trato de optimizar recursos para que los niños lo pasen bien. Y yo también, para qué engañarnos. 

Provisionalmente, se ha desmontado mi doble rol de trabajadora por cuenta ajena y de madre (trabajadora también, una cosa no quita a la otra). Hay que cambiar el chip. Reinventarse o morir.

El día entre semana lo empezamos con un buen desayuno en la cocina. Me trae muchos recuerdos de infancia poder hacer vida en ella, pues cuando era pequeña en mi casa era así. Todos sentados en una mesa comiendo y riendo, o mi hermana y yo haciendo los deberes. También abriendo regalos de cumpleaños o recibiendo alguna que otra charla de mis padres, de esas que sólo entiendes cuando eres mayor (sobretodo ahora con hijos)

Luego salimos a jugar un rato al jardín, y más tarde entramos a casa a pintar dibujos o a hacer manualidades caseras. En el caso del mayor, se dedica a hacer también las tareas que nos dejó su maestra,  Dolors, a la cual tiene presente con mucha ilusión, junto a sus amigos del Pràctiques 2.

Alguna tarde vamos a recoger a Pau al trabajo y así nos acercamos al centro. Éste está lleno de vida y hay mucho comercio. Sobretodo peluquerías, supermercados, y tiendas de ropa deportiva. Y unas cafeterías estilo vintage, en las cuales aún no me he atrevido a preguntar el precio de un café. 

¿Qué más? Mucha gente en bicicleta, haciendo footing, con un café en la mano...La preciosa catedral de Nidaros, las vistas al río y un cementerio absolutamente pintoresco. ¿Qué se echa de menos? Parece mentira pero no hay ni un bar Manolo, ni un Todo a 1 euro, y el Decathlon tampoco existe. Grandes referentes los míos pensareis. Pero es algo que me ha llamado la atención.

Los días  que no bajamos al centro los sustituimos por pequeñas salidas por el barrio, que tiene muchas zonas verdes y una pista de fútbol grande al aire libre.

Pero no me quiero dar todo el mérito, porque ayer por la tarde surgió de los pequeños la idea de un picnic improvisado en el jardín. Arnau lo preparó todo. Consistió en una merienda infantil a base de galletas Oreo y leche, a la que Adrià accedió encantado. Para muestra un botón.


Y luego a Pau le tocó afrontar la subida de azúcar...



¡Hasta pronto! Un abrazo desde Trondheim.

domingo, 9 de junio de 2013

Primeras vivencias

Ya ha pasado una semana desde que llegamos. Os cuento nuestras primeras vivencias en la ciudad.

Vivimos en la planta baja de una casa unifamiliar a veinte minutos a pie del centro. Es un barrio tranquilo lleno de casitas de cuento. Me enamoran las ventanas que tienen con repisas llenas de detalles de estilo nórdico, sobrios y a la vez elegantes. Os explicaré mejor en próximas crónicas porque estoy pensando ideas de cómo decorar nuestras ventanas.

En la parte trasera de las casas, hay un jardín, donde no puede faltar una cama elástica, de las que Pau ya os ha hablado en su blog

En nuestro caso, compartimos jardín con dos familias más: Los propietarios que viven arriba y son una pareja de treintañeros con un perro, y una pareja de mediana edad con su hijo de catorce años, que viven en una casa junto a la nuestra.

Es curioso ver cómo los niños se distraen tocando el musgo de los árboles, o mirando a los pájaros, comiéndose los gusanos que salen después de la lluvia. También les gusta jugar a detectives detrás de las plantas. Aquí hay muchas flores de diente de león, y Arnau se ríe mucho soplando y viendo como se esparcen por el aire las semillas. Adrià intenta hacer lo mismo con otras flores, y se queda sorprendido cuando ve que los pétalos no se caen como le sucede a su hermano.

Hay días en que que los pequeños juegan con los niños del jardín contiguo, unos gemelos de la edad de Arnau. No deja de ser curioso oír a los nuestros hablando en catalán o castellano, y a ellos en noruego, y repetirse mutuamente. O alucinar cuando de repente cantan todos el "Gangnam Style" en la cama elástica y se parten de risa. Quién fuera niño ¿verdad?

Las temperaturas estos días oscilan entre 9ºC y 16ºC, con un polar y un chubasquero encima se va bien.
Aunque aquí, para los locales está claro que esto es muy buen tiempo. Hace un par de días estaba con los niños en el saltador (yo fuera, eh?) y llevaba un polar finito, cuando de repente me saludó el padre de familia desde su ventana sin camiseta. Se veía al hombre intentando captar los rayos de sol que había como fuera. Un divertido contraste vernos a los dos hablando con nuestras respectivas pintas. 

Aquí la mayoría de los paquetes vacacionales son de playa, playa y más playa. Desde Trondheim hay vuelos low cost a Murcia, Alicante, Málaga y Mallorca entre otros calurosos destinos.

A la gente con la que hemos charlado, les encanta el sol que nosotros hemos dejado atrás. Pero yo os tengo que decir que, aunque el calorcito tan nuestro se echa de menos, cuando veo aquí los carteles promocionales con familias en bañador me coge un frío...Supongo que será cuestión de acostumbrarse.

Aquí teneis unas fotos (hechas con el móvil, ejem) de una pequeña excursión de hoy con buenas vistas al fiordo de la city  




¡En breve, más cosas! ¡Saludos!

sábado, 8 de junio de 2013

¡Volando vamos!


Después de algunos meses separados, ya estamos en Trondheim la familia reunida de nuevo. 

El viaje en avión con los niños tuvo momentos de todo, pero gracias a la amabilidad de los demás pasajeros del vuelo y al bendito Sr. Kinder Huevo, de los que Adrià se puso tibio, llegamos con mayor o menor dignidad, según se mire si una recuerda mentalmente los best moments de cuánto falta, no puedo caminar etc.

En cuanto entramos al avión, los pequeños, atraídos por la carta de a bordo, insistieron en tomar un bocadillo. Pese a los precios, accedí: Lo que sea por un viaje tranquilo. 

La primera en la frente llegó cuando la azafata fue a cobrar y la tarjeta no funcionaba en el terminal del avión. Obviamente, Ley de Murphy total, no llevaba más que cinco euros en el monedero y ninguna otra tarjeta alternativa (sí, sí lo sé, soy un desastre).

Rápidamente y roja como un pimiento, hice el ademán de devolver parte de la comida (otra no pude porque Arnau ya le había hincado el diente) y me dijeron que nos la quedáramos que los niños habían de comer.

La famosa honradez noruega de momento se cumple. Todo costaba dieciocho euros pero insistieron que con que les diera los cinco euros que llevaba era suficiente. Uff, ¡salvados!

A continuación,  trajeron a los enanos unos peluches, pegatinas y unos cuentos.  Y los vasos de agua que necesitamos. Sin duda, SAS es una compañía mammaproof. O como decía Arnau: "això és perquè ens portem bé, oi mama?"

Cuando llegamos a Oslo, no había manera de saber dónde estaba el enlace a Trondheim, así que con unos carrillos como Heidi, empecé a deshojar mi inglés salchichero. He de decir que conseguí llegar a la puerta de embarque sin demasiados problemas.

De Oslo a Trondheim apenas hay una hora, y las fieras lo llevaron muy bien. Ya tenían ganas de ver a Pau y en cuanto lo divisaron casi se lo comen. 

Muchas emociones, y, sin duda, el inicio de una nueva vida.

Os seguiré contando... very soon.